Si los niños revelan una curiosidad sorprendente que los activa para disfrutar de los resultados que ella les da al buscar respuestas a sus inquietudes, ¿por qué aún determinadas escuelas aún insisten en dictados, carretillas (deformación a la que ha llegado las viejas cartillas), lecturas inmotivadas y obligatorias a destajo, copias y memorizaciones sin razón (esto no quiere decir que no hay que usar nuestra memoria, sino que ha de llegarse a ella, por medio de la práctica reflexiva que la fije en articulaciones de aplicación competentes ante problemas comunicativos cotidianos.
Si ignoramos algún dato, pueden resultar incompletos nuestros intercambios comunicativos) Y si el adolescente es inseguro por naturaleza, aunque aparente lo contrario, ¿por qué hacerlo sentirse más, si podemos desde nuestra clase ayudarlo a tener confianza en sí mismo, que no es el atrevimiento que ellos fingen?
Si acaso uno que otro maestro se atreve a darle un poco de vida a las cajas mortuorias que vienen siendo las clases de español y hace aprender los mecanismos gramaticales de manera funcional, razonada, científica y aplicada directamente a los problemas de expresión oral y expresión escrita que surgen de investigaciones o requerimientos comunicativos de los educandos...
Esto significa que el alumnado debe saber responder a retos y problemas comunicativos que se le presenten en la vida familiar, cultural, social, laboral, personal, etc.
La casera, una desaliñada, casi barbuda mujer española llamada Herrero, no me molestaba con chismes o con críticas de la última lámpara eléctrica achicharrada en mi habitación del tercer piso frente al vestíbulo; y mis compañeros inquilinos eran tan silenciosos y poco comunicativos como uno pudiera desear, siendo mayoritariamente hispanos de grado tosco y crudo.
Por tanto, aprender a crear variados instrumentos informativo-comunicativos...
Jamás, o pocas veces, se les dan conocimientos necesarios y acordes con las vivencias de sus años, con su búsqueda de experiencias; en pocas palabras, que sean útiles respuestas a las inquietudes naturales de los estadios psicológicos por los que atraviesan; esto es, funcionales, comunicativos, necesarios para ayudarlos a su maduración.
La concepción de un libro de texto en sentido tradicional choca totalmente con la flexibilidad y libertad que exigen los actuales enfoques psicopedagógicos, comunicativos, funcionales socioculturales y creativos donde el peso a los estudios formalistas de la lengua y los datos literarios, aunque tienen importancia, no son el centro del desarrollo didáctico, sino el impulso para perfeccionar las competencias comunicativas del alumnado.
Sus antecedentes son tan remotos como el origen de los grandes educadores que pensaron en hacer significativos y comunicativos los aprendizajes en pos de hacer del alumnado personas competentes en los problemas de todo tipo que la vida les planteara.
Hoy, como es evidente, el calificativo de comunicativos y socioculturales les ha dado un vigor que se demuestra en los resultados exitosos que se obtienen cuando se aplican eficazmente y con la guía técnica adecuada, que supere el antiguo escollo de actividades basadas en tanteos al azar.
Una sistematización de sus prácticas socioculturales desde preescolar hasta bachillerato debía presidir la educación básica para ir desarrollando las capacidades innatas al ser humano, hasta volver competentes a los educandos en la solución de los problemas comunicativos imprevistos que la vida personal, social y laboral les vaya presentando.
Todos los trabajadores del sistema de comunicación, de transportes, ferrocarrileros, camioneros y quienes operen los demás sistemas comunicativos, tal como lo han venido haciendo, deberán cooperar en la eficiencia de esa vasta red con el criterio de que mantienen nuestra unidad y sirven en una tarea patriótica e indispensable.