Formidable sombra, Tal vez mi lengua te insultó importuna No te ladra mordaz cuando te nombra: Sólo quien te rindió fue la Fortuna.
La audacia provocativa con que ataca el sancta santorum de la Economía política, las ingeniosas paradojas con que se burla del sentido común burgués, la crítica demoledora, la ironía mordaz, ese profundo y sincero sentimiento de indignación que manifiesta de cuando en cuando contra las infamias del orden existente, su convicción revolucionaria, todas estas cualidades contribuyeron a que el libro ¿Qué es la propiedad?
Calvo es más cortado; Asinio, más numeroso; César, más brillante; Celio, más mordaz; Bruto, más grave; Cicerón, más vehemente, más lleno, más enérgico; pero todos tienen la misma sanidad de elocuencia; de suerte que, si tomas en las manos juntamente los libros de todos, verás que aun en diversos talentos hay cierta semejanza y parentesco de juicio y voluntad; y en cuanto a que unos motejaron a otros, y quedan cartas suyas en que se nota algo por donde se descubre su recíproca malevolencia, es vicio, y no de oradores, sino de hombres.
El peruano se sintió despectivo frente al destino, por dos razones: tenía dinero y sabía boxear. Replicó, entre un poco
mordaz y otro poco escéptico: —Entonces, ¿por qué se ha embarcado en este buque, caballero?
Roberto Arlt
Por lo demás, si hay algo de cierto en el mordaz proverbio que dice: Al andaluz hacedle la cruz, y al cordobés de manos y pies, bien puede afirmarse que no reza con las mujeres; antes son víctimas las pobrecitas de lo levantiscos, alborotados y amigos de correrla que son generalmente los maridos.
Si para alcanzar y dilatar el Imperio les aprovechó a los romanos el culto de sus dioses Luego de ningún modo semejantes dioses como éstos que se aplacan; o, por mejor decir, se infaman con tales honores, que es mayor culpa el gastar de ellos siendo falsos que si se dijeran de ellos con verdad; de ningún modo, digo, estos dioses pudieron acrecentar y conservar el Imperio romano; porque si pudieran hacerlo, dispensaran antes esta gracia tan particular a los griegos, quienes en iguales solemnidades divinas, esto es, en los juegos escénicos, los honraron con mucho más respeto y más dignamente, supuesto que ni aun a si propios se eximieron de la mordaz crítica de los poetas con que veían afrentar a los dioses...
Si mi numen responde a la alegría del asunto, logré la victoria, y faltarán al acusador las pruebas de mi delito. Revienta de despecho, mordaz envidia; ya he conquistado gran fama, y aun será mayor si continúo, del modo que comencé.
Ved lo que hay de cierto: cuando yo lanzaba dolorosos gritos, vosotros os reíais a placer, y en vez de compadecerme, sólo anhelabais que la angustia me inspirase algún chiste mordaz y divertido.
Se manifiesta agresivo, cáustico, mordaz, sangriento, y como todo hombre fácil en atacar, no sabe defenderse ni resistir cuando se ve acometido.
–Pues yo no creo que usted, con ese genio que Dios le dio tan
mordaz, deje de tener algo escrito que valga la pena de leerse; y vengo por ello.
Mariano José de Larra
Hubiérasele dado a cada uno de ellos obligación, que le ocupara durante las horas enervantes del calor, y de sus bocazas charlatanas no saliera entonces la menor alusión mordaz, ni asomaran siquiera a su mente los malos pensamientos.
¿Qué es este miedo aterrador que siento y esta congoja inalterable y fría, que cuanto más desvanecerle intento más se burla mordaz del ansia mía?