Sócrates: Y si disputáramos sobre la diferente magnitud de los cuerpos, ¿no nos pondríamos a medir, y no se daría en el acto por terminada nuestra disputa?
Eutifrón: En el acto. Sócrates: Y si disputáramos sobre la pesantez, ¿no se terminaría bien pronto nuestra disputa por medio de una balanza?
Trabajaremos, en primer lugar, en contacto estrecho con esta Asamblea para revisar y mejorar el marco legal que regula este tipo de comercio. Las calles no pueden seguir siendo botín económico y político que se disputa con funcionarios.
Por más que, durante la secuela del juicio, el gobierno de México hizo valer títulos que de buena fe estimó justos sobre la totalidad del terreno en disputa (242 hectáreas, aproximadamente), la mayoría del Tribunal de 1911, representada por el Comisionado Presidente Eugene Lefleur, de nacionalidad canadiense, y el Comisionado mexicano, Fernando Beltrán Puga, nos concedió sólo la porción que antes he dicho, 177 hectáreas, y que constituye con mucho, la mayor parte.
J., filólogo, historiador y arqueólogo, del que Menéndez y Pelayo, en el prólogo a la segunda edición de los Heterodoxos españoles, dice que es, sin disputa, el español de su tiempo que ha publicado mayor número de documentos de la Edad Media.
Entiendo que el Partido está trabajando hacia la concreción de esa agenda para la reforma, tiene todo un programa de trabajo, y el reto principal que debe abordar el Partido, el PRI, como los otros partidos, es ponerse en circunstancias para competir, bajo condiciones mucho más equitativas, en el nuevo ambiente de competencia y de disputa legítima, legal, por el poder en México.
En contraposición a lo negociado en el TLC, para 2000 se empezaron a conocer operaciones realizadas durante el salvamento bancario que confirmaban la entrega sistemática de la banca mexicana a los extranjeros. Fue el caso de la disputa de uno de esos bancos con el IPAB, el Instituto responsable de administrar el resultado del Fobaproa.
Las negociaciones diplomáticas con Gran Bretaña por el diferendo Malvinas toman una orientación favorable para la Argentina a partir de la Resolución 2065 (XX) de la Asamblea General de las Naciones Unidas (Anexo II/1); en esta Resolución que constituyó un éxito de la diplomacia Argentina se reconoce la existencia de una disputa de soberanía entre Argentina y Gran Bretaña, urgiéndose a esta última a poner fin a dicha situación colonial.
Así, se denunció: Lo importante de esta disputa es que nos revela una vez más cómo se hicieron acuerdos ocultos para lograr que instituciones extranjeras pudieran hacerse cargo de los bancos nacionales después de la quiebra masiva que comenzó a finales de 1994.
La crisis del régimen económico capitalista que en algunos países ha originado, para salvarse, los regímenes fachistas y totalitarios, se expresa también en forma de disputa violenta interimperialista para la conquista de los mercados y de las fuentes de producción de materias primas.
Declara la necesidad de que se aceleren las negociaciones previstas en la resolución 2065 (XX) de la Asamblea General entre los Gobiernos de la Argentina y del Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte para arribar a una solución pacífica de la
disputa de soberanía existente entre ambos sobre las Islas Malvinas (Falkland); 3.
la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas
Tal disputa alcanza, a la fecha, las proporciones de una tragedia como jamás había vivido el mundo; en ella, la libertad de los hombres ha sido brutalmente violada, la soberanía de los pueblos destruida sin miramientos, y una guerra en la que todo principio de humanidad, toda ley, todo derecho, sucumben ante la realidad de la fuerza, que se presenta y esgrime como argumento supremo.