Toda muerte o toda herida grave de un prisionero de guerra, causada, o que haya sospecha de haber sido causada, por un centinela, por otro prisionero de guerra o por cualquier otra persona, así como todo fallecimiento cuya causa se ignore, será inmediatamente objeto de un investigación oficial por parte de la Potencia detenedora.
A los ratones della jamás los persiguió gato, ni en ella se oyó ladrido de perro: todos eran del género femenino. De día pensaba, de noche no dormía; él era la ronda y
centinela de su casa y el Argos de lo que bien quería.
Miguel de Cervantes Saavedra
Pero el Urdiales es un pendón que desde que le dio en la nariz el Zargatona, cuando pasa por la calle, si el otro está de centinela, yo no sé cómo no se las gasta de tanto mirárselas, las puntas de los brodequines.
ntre las hojas de laurel marchitas de la corona vieja que en lo alto de mi lecho suspendida un triunfo no alcanzado me recuerda, una araña ha formado su lóbrega vivienda con hilos tembladores más blandos que la seda, donde aguarda las moscas haciendo centinela, a las moscas incautas que allí prisión encuentran y que la araña chupa con ansiedad suprema.
La Italia, acordándose que fue madre de los romanos, ha producido a Dante, a Galileo, a Miguel Ángel, a Cristóbal Colón, a Filangieri y a Becaria; la Inglaterra, a Shakespeare, a Bacon, a Newton; la Alemania, aquella Alemania, bárbara e inculta, cual nos la dio a conocer Tácito, es una fuente fecunda de ideas valientes, de erudición profunda, de crítica eminente; y la Francia, colocada como centinela avanzada del mundo intelectual, no permite que una sola idea se pierda o desvirtúe, de cuantas emiten los hombres de todos los climas, en todos los idiomas.
Si ellos por espontánea voluntad se lanzaron a la revolución, ¿por qué tenían que someterse a la presión de otras voluntades? Y llegó el momento inspirado, anunciémoslo con las palabras del tribuno inglés en la guerra mundial: “¿Centinela?
Cruzó el patio y se detuvo frente al cuerpo del edificio que ocupaba el coronel. Un
centinela se cuadró frente a él. Benegas trepó unas escaleras y golpeó con los nudillos en una puerta.
Roberto Arlt
Respondieron de fuera: -Yo soy, que no es nadie, señor Monipodio: Tagarete soy,
centinela desta mañana, y vengo a decir que viene aquí Juliana la Cariharta, toda desgreñada y llorosa, que parece haberle sucedido algún desastre.
Miguel de Cervantes Saavedra
Talle llevaban de no acabar tan presto el comenzado cántico, si no sintieran que llamaban a la puerta apriesa; y con ella salió Monipodio a ver quién era, y la
centinela le dijo cómo al cabo de la calle había asomado el alcalde de la justicia, y que delante dél venían el Tordillo y el Cernícalo, corchetes neutrales.
Miguel de Cervantes Saavedra
Todo yace en sueño y sombra, a la luz de las estrellas: sólo lucha con la de ellas la que alumbra un ajimez de la torre de los Picos, y a través de cuya espesa celosía, brilla presa su rojiza brillantez. ¿Quién allí tan a deshora en aquella torre vela, mientras guarda un centinela su almenado murallón?
Cuando, sentada en el balcón, espero, sin aliento, sus pasos, las hojas están mudas en los árboles, el agua está quieta en el río como la espada en las rodillas de un centinela dormido...
ESCENA I JUAN, MARTA, MARCOS, ROSA, RAMÓN, TERESA,
CENTINELA MARCOS (Juan, Marta, Marcos, Rosa, Ramón, Teresa y otros forman parte de uno de los grupos.) (Sonriente.) Hace veinticuatro horas solamente que ese viejo sol tostaba los lomos del rebaño, y hoy besa las frentes de hombres libres.
Ricardo Flores Magón