The Elder Scrolls Online: Gold Road - Análisis

Diez años después de su lanzamiento, The Elder Scrolls Online sigue creciendo con nuevos añadidos, contenidos y expansiones. Tras renovar el mundo de juego de Fallout 76 con Skyline Valley, Bethesda vuelve a la carga y lanza al mercado un nuevo capítulo de su exitoso MMORPG. Gold Road nos lleva a Bosque Occidental en una gran aventura dividida en tres campañas diferentes en las que tendremos que enfrentarnos a nuevos peligros para salvar Tamriel y el tejido mismo de la realidad. Una más que completa expansión que continúa las aventuras que vivimos en el capítulo Necrom, aunque también puede ser disfrutada de forma independiente.

Bienvenidos a Bosque Occidental

Los acontecimientos de Gold Road continúan el arco argumental que disfrutamos en Necrom como agentes del destino a las órdenes de Hermaeus Mora, el príncipe daédrico más lovecraftiano de los planos de Oblivion. Para empezar a jugar una vez adquirido el capítulo, basta con entrar en el menú de juego, colecciones, capítulos, Gold Road y marcar la misión como principal. Esta nos llevará a Skingrad, donde nuestra querida Leramil la Sabia nos espera para hablarnos de un nuevo peligro. Ithelia, princesa daedra de las sendas y Señora del Camino no Recorrido, anda libre por Tamriel causando estragos en el tejido de la realidad de Nirn. Como agentes del destino tendremos que volver a unir fuerzas con la erudita, nuestra antigua aliada, y reunirnos con Beragon y nuestros viejos amigos de Necrom para investigar el paradero de Ithelia y tratar de descubrir sus verdaderas intenciones.

Mientras tanto, las cosas se están torciendo en Bosque Occidental. Un nuevo bosque ha aparecido por arte de magia, el Bosque Aurora, y las tensiones entre su autoproclamado rey y la legión de Skingrad no auguran nada bueno. Por si esto fuera poco, nuevas tropas de daedra, los Nacidos de la Esquirla, están apareciendo por la zona. Un problema casi tan grande como el extraño fenómeno que está desertizando la linde del bosque y que bajo el nombre de Quema Salvaje está ejerciendo una malvada influencia sobre las criaturas de la zona. Una vez más nos tocará ejercer de heroínas y héroes, ir mucho más allá de nuestro papel como agentes del destino y tratar de resolver los problemas que asolan esta nueva zona de Tamriel.

Un capítulo más tradicional, pero con sorpresas

Gold Road me ha llamado mucho la atención por ser el capítulo que mejor sigue el estilo de narración más tradicional de los juegos single player de Elder Scrolls Online. Lo que comienza como una única campaña pronto se divide en tres campañas muy diferentes, cada una con un argumento, muy bien escrito, que enlaza sus misiones en un cuartel general que hace que sea difícil perderse entre misión y misión. Lo que empieza de forma un poco ca��tica con la aparición de Ithelia, la misteriosa Recopilación y los distintos daedra, pronto va aclarándose y tomando distintas rutas en las que aliados como Leramir la Sabia, Beragon Daga Afilada y la Tribuna Alea Ídolo tomarán la voz cantante.

Tres reliquias muy especiales que serán vitales en el desarrollo de las campañas justifican su presencia con tres objetos muy diferentes, cada uno con su propia utilidad y naturaleza, que se usarán de forma constante en el juego. Cerrar portales, iluminar lo oculto y rastrear ciertas fuentes de magia serán acciones que llevaremos a cabo varias veces en la aventura, tomando especial protagonismo en los últimos compases de cada cadena de misiones y en los espectaculares enfrentamientos contra los jefes finales. Si jugaste las mazmorras de Gold Road, las misiones siguen la misma jugabilidad convirtiendo el escenario en un tablero de bullet rain en el que las trampas, el uso de objetos y las distintas estrategias consiguen aportar un algo más a la jugabilidad ofrecida por capítulos anteriores. El resultado final es un regreso a la filosofía de Oblivion o Skyrim pero desde un prisma moderno que no olvida la naturaleza MMORPG de Elder Scrolls Online en los combates.

Escribanía y estilo, las nuevas mecánicas

Más allá de las campañas y de las variaciones en el enfoque de jugabilidad y combate, lo que más sorprende de este nuevo capítulo es la aparición de la Escribanía y el estilo. Mientras el segundo se limita a permitirnos personalizar los hechizos y habilidades con distintos efectos y colores encontrados en el juego de forma parecida a cómo personalizamos ropas, estilismos y armaduras; el primero va mucho más allá. La Escribanía se establece como la protomagia de Tamriel, un arte perdido previo a la creación del primer gremio de magos que nos permitirá crear nuestros propios hechizos y habilidades. Mediante el uso de grimorios, tintas y pergaminos con distintos efectos, podremos crear potentes magias con tres niveles de efecto que dejan en pañales la gran mayoría de habilidades y hechizos de clase, además de permitir un rango de personalización enorme según vayamos encontrando nuevos grimorios y pergaminos.

Crear tus nuevos hechizos es una gozada con obvias recompensas en combate, pero lo realmente interesante del asunto es cómo se introduce esta nueva mecánica en la historia de Tamriel. La Escribanía aparece en forma de misión -una vez más la puedes activar desde el menú de colecciones- y ofrece una de las campañas más interesantes de este nuevo capítulo. Lo que comienza como una búsqueda en el Escolario, una extraña biblioteca recién descubierta, nos llevará a conocer a Corneja y a la Devota Caballera. Dos personajes muy interesantes que nos pondrán tras la pista de este arte perdido. Siguiendo sus pistas, tendremos que hacernos con el favor de los Luminarios, unas misteriosas criaturas forjadas de pura magia que serán nuestra fuente principal de recursos para ejercer la escribanía.

Un capítulo para todo tipo de jugadores

Gold Road se define como una nueva gran expansión destinada a todo tipo de jugadores. Los veteranos encontrarán retos de sobra para campeones de niveles altos, los expertos por debajo de nivel 50 podrán disfrutar de alicientes más que de sobra para continuar sus andanzas y alcanzar el nivel de campeón, y los recién llegados encontrarán un capítulo que mezcla lo nuevo y lo viejo para ofrecer la mejor cara de Elder Scrolls Online. Más allá del ajuste de dificultad, que permite disfrutar la experiencia a jugadores con PJ de cualquier nivel, Gold Road ofrece una experiencia muy grata tanto para partidas y grupos de amigos como para lobos solitarios que prefieren vivir la experiencia por su cuenta. Contenido más que de sobra y mimado al milímetro para que nadie se sienta fuera en esta nueva propuesta.

Por último, para los que disfrutamos paseando, explorando el mapa y maravillándonos con sus rincones, Gold Road ofrece una mezcla de entornos y biomas, cada uno con sus propias melodías, en una gran aventura que nos llevará por todos los rincones de Bosque Occidental, algunas zonas ya conocidas de Nirn y planos de Oblivion como Apocrypha y el nuevo Páramo Espejado. Las nuevas criaturas y facciones ofrecen tratamientos interesantes como el de Quema Salvaje y Nacidos de la Esquirla, aunque mis favoritos son las criaturas espejadas. Enemigos con un acabado fracturado de cristal que, como no podía ser de otra forma, cuenta con sus homólogos en forma de mascotas y acabados para nuestra apariencia.

¿Merece la pena?

Gold Road vuelve a demostrar el buen hacer de Bethesda y su mimo por un juego que cumple ya sus 10 años y que sigue mejorando con cada nueva entrega. Nuevas melodías, un nuevo escenario con tres potentes campañas, gran cantidad de misiones y todo tipo de retos se unen a nuevos enemigos, personajes y objetos para dar como resultado una gran expansión que se adapta a todo tipo de jugadores. El estilo y la escribanía terminan aportando su granito de arena para celebrar los diez años de Elder Scrolls Online con nuevas opciones de personalización, la posibilidad de crear nuevos hechizos devastadores y una campaña propia que es de lo mejor que he podido disfrutar en mis aventuras por Tamriel.

En definitiva, The Elder Scrolls Online: Gold Road ofrece motivos más que de sobra para volver a Tamriel y redescubrir una de las zonas más queridas de Elder Scrolls IV: Oblivion. Escenarios impactantes, historias que recuerdan a los juegos single player y enemigos épicos se unen para crear una experiencia que convence a jugadores veteranos, grupos de aventureros, lobos solitarios y recién llegados a este MMORPG que, cada año que pasa, es mejor.