Apocalíptico, desolador y con más drama que la película.
Sin iniciar este libro ya estaba informado de que la película protagonizada por Will Smith en Apocalíptico, desolador y con más drama que la película.
Sin iniciar este libro ya estaba informado de que la película protagonizada por Will Smith en el 2007, era muy diferente a la historia original presentada por Richard Matherson. Y sí, claro que hay cambios importantes, pero al comparar y analizar con minuciosidad notaremos que la diferencia no es tan drástica como inicialmente parece. La adaptación cambió el argumento original, pero mantiene los temas claves que el autor expresó en su nóvela. Soy leyenda, es una excepción, donde tanto el libro como la adaptación tienen argumentos con gran desarrollo y bases bien definidas; sin importar el triste porvenir que nos es presentado, disfrutaremos de esta historia sin dudar.
La elección de vampiros en la novela y zombies en la película es correcta, debido a que los miedos que siente el público pueden variar dependiendo de la época. Así como en el siglo XX los vampiros gozaban de fama por el horror que causaban, en la actualidad muchos temen a los zombies por tantas películas apocalípticas. Si las criaturas escogidas hubieran sido otras quizás ni conoceríamos la historia.
Respecto a la novela, Richard nos presenta una historia con matices dramáticos muy interesantes, que nos hace imaginar cómo sería el mundo en caso de la propagación de una enfermedad que amenaza la extinción de la raza humana. ¿Cómo el coronavirus? Si, algo así, pero más fatalista. Acompañaremos a Neville, el protagonista, en su tristeza, soledad y desesperación por enfrentarse a la cruel realidad. Neville sentirá que no tiene motivos para seguir viviendo y constantemente sufrirá por su lamentable estado a lo que llama vida. Por la pandemia que estamos viviendo en este 2020, podremos fácilmente “ponernos en los zapatos” de Neville, entenderlo y leer hasta el final su historia sin perder el interés. Soy leyenda, es una excelente opción para leer en estos tiempos de pandemia.
La aventura de Neville fue interesante, la explicación del origen de la enfermedad fue correcta y me gustó que el autor nos contara la historia del pasado y el presente simultáneamente. También es muy destacable la capacidad de esta historia de hacerte reflexionar y preguntarte: ¿Qué harías si fueras el último sobreviviente de la humanidad? ¿Te esconderías en tu casa y vivirías con indiferencia el resto de tus días? ¿Buscarías formas de curar la enfermedad que el mundo sufre? ¿Asesinarías a todos y te convertirías en el rey de un mundo solitario? ¿Te rendirías? ¿Qué harías? Cada quien reaccionaría diferente, y la premisa de esta obra te da mucha curiosidad por conocer el desenlace de este panorama tan desesperanzador. Sin embargo, a pesar de las cualidades de esta obra, dos grandes defectos evitaron que calificara este libro con las cinco estrellas.
El primer defecto fue la narración: Fue horrible y pésima. No todo el que crea historias sabe contarlas y Richard es un ejemplo de ello. Leer su redacción fue agobiante e insoportable. ¿Cuál fue el problema? Los signos de puntuación. Es incomprensible que en la mayor parte del texto no apareciera una coma, un punto y coma, etc., sino solo el punto y de forma muy repetida. Incluso en algunas partes, aparecen párrafos de diez o más renglones y cada dos palabras nos tropezamos con un punto. Eso me pareció desesperante y se asemeja a cuando vamos en el transporte, hay muchos vehículos y vamos avanzando diez metros por minuto. Sin exagerar, es la peor narración que he leído en mi vida.
El otro defecto fue Neville. Comprendo a Neville, su situación, trastorno, aislamiento y el infierno que estaba viviendo, pero a pesar de ello, fue muy desagradable estar leyendo a un borracho que se quejaba a menudo por la impotencia de no tener sexo. ¡Que pereza de protagonista! Por Neville nunca sentí compasión o cariño y si vivía o moría no fue algo que realmente llegara a importarme. Creí que a medida que avanzarán las páginas la adrenalina de la supervivencia dotaría a Neville de rebeldía y ganas de batallar por la humanidad, pero no, que decepción de personaje. Todo el tiempo fue un perdedor depresivo y esa es la imagen que me queda de él. No sé en quien se basaría Richard para la creación de este personaje, pero en mi opinión, se equivocó completamente con la elección de las características de su protagonista. Lo irónico es que esa personalidad habría sido perfecta para un personaje secundario, ¿por qué? Porque cuando Neville entabló conversaciones su conducta ayudaba a sobresalir a los demás personajes. Es algo muy extraño, y repito que no estoy exagerando, pero sentí más curiosidad por todos los personajes, incluso el perro, que por Neville. Fue rarísimo.
(view spoiler)[Si Neville tuviera un poco más de simpatía y esperanza en su personalidad, con el final mostrado este libro hubiera sido perfecto. Soy leyenda pertenecería a esos libros que te hacen llorar por los infortunios del protagonista y que se quedan grabados en nuestro corazón. Sentir agrado por el protagonista es clave para conmoverse por las situaciones adversas que se presentan, y Neville sí que las tuvo, porque ser perseguido y cazado solo por ser considerado una amenaza -a pesar de que no lo era- es algo muy cruel que lo demuestra. Esa situación me recuerda cuando perseguimos en nuestra casa a un ratón, se mata a una serpiente o se caza a un oso solo por el miedo que sentimos hacia ese animal, cuando realmente ellos nos tiene más miedo y solo intentan sobrevivir. Con otro protagonista esta obra se convertiría en uno de mis libros favoritos: Es una pena que no ocurriera así.
También, pensar en la cantidad de especies que se han extinguido en este planeta, y comprender que en cada una de ellas existió una leyenda, es cruel y perturbador. Desgraciadamente, ese es el ciclo natural de la vida porque sin excepciones todas las especies desapareceremos algún día, pero a pesar de ser lógico, es un final tan triste y desesperanzador que fue inevitable no contagiarme de esa nostalgia. Las despedidas siempre me han dolido por lo que imaginar el final de una especie realmente me tocó el corazón. (hide spoiler)]
Respecto al final solo expresaré que fue perfecto e inesperado por lo que sin importar los defectos y la falta de acción, este libro vale la pena terminarlo: Se los garantizo. Libro muy recomendado....more
Más simple de lo que esperaba... ¿Qué acabo de leer?
En realidad 2,8
Este libro reconocido mundialmente como un símbolo de la ciencia ficción, con pelícMás simple de lo que esperaba... ¿Qué acabo de leer?
En realidad 2,8
Este libro reconocido mundialmente como un símbolo de la ciencia ficción, con películas muy famosas y con un público muy adepto, para mí significa una puerta que me comunica con la nostalgia de los años pasados. Como ya lo he dicho en varias reseñas, hace algunos años no disfrutaba de la lectura y justamente en esa época fue que conocí este libro. La historia, comenzó un día en el que mi hermano estaba aburrido en su trabajo, tanto así, que resultó buscando por internet libros de ciencia ficción para distraerse un rato. En ese momento eligió El juego de Ender, se lo devoró y luego me lo recomendó porque solíamos ver películas y anime juntos. Yo le seguí el juego y también lo leí, pero creí que ese era el final de las lecturas compartidas. Para mi sorpresa una semana después nuevamente estaba promocionándome otro libro, esta vez este, porque lo había escuchado recientemente en un audiolibro y le había encantado. Ese día el título me llamó mucho la atención, pero a pesar de ello no lo leí y quedó como una recomendación ignorada. Sin embargo, hace unos meses estaba navegando por internet y sin darme cuenta resulté investigando personas famosas que compartían mi día de cumpleaños. La sorpresa fue grande al enterarme de que uno de esos seres nacidos un 16 de diciembre era Philip K. Dick. En ese momento recordé esta obra y desaparecieron mis dudas: Tenía que leerlo, así no me gustara. Siempre he sentido curiosidad por conocer cómo piensan quienes nacieron el mismo día que yo.
Pero no todas las historias tienen un final feliz. En esta ocasión debo reconocer que aunque el libro me gustó ha sido un texto tan extraño que es inevitable no sentirme contrariado al momento de expresarme sobre esta obra. Intentaré hacerme entender, pero primero es necesario explicar que la historia presentada por Philip trata sobre un cazarrecompensas llamado Rick Deckard que tiene la tarea de desactivar unos robots llamados Nexus 6. La humanidad se ha visto forzada a viajar a Marte para intentar sobrevivir de la grave contaminación que se presenta en la Tierra, debido a la Guerra Mundial Terminus que llenó el aire de plomo y que causó el exterminio de casi todas las especies. El resultado es un mundo desolado, triste y en estado de destrucción, característico en este tipo de libros clasificados como distopías. Los Nexus 6 buscando un futuro mejor huyen a la Tierra para mezclarse entre los restantes seres humanos y así llevar una vida más tranquila dejando atrás la esclavitud, pero naturalmente eso no es permitido por lo que tendrán que permanecer ocultos por su propio bien.
Como pueden leer, la sinopsis y el contexto son excelentes, pero el problema es que entre más iba avanzando más pereza fui sintiendo. Parece que Philip desarrolló tan bien su mundo que cuando tuvo que desarrollar sus escenas no usó la misma dedicación, por lo que a medida que avanzaba el libro se fue volviendo aburrido, predecible y simple; la falta de acción, también fue un factor negativo que afectó directamente la intensidad de una historia muy prometedora. Además fue muy complicado acostumbrarme a su prosa, principalmente en el inicio, porque Philip nos hostiga con muchos términos de su mundo que no comprendemos. Ese detalle nos obliga a leer lentamente porque cada palabra puede ser tan importante, que en una pequeña distracción podemos perder el hilo de la historia. Obviamente Philip conocía su historia y todo ese vocabulario era muy familiar para él, pero da la impresión de que no pensó en sus lectores porque algunas palabras ni siquiera las explicó.
Pero tranquilos, no todo es malo. Uno de los aspectos más positivos de este libro es la denuncia sobre las guerras y las terribles consecuencias que pueden causar en nuestro planeta. Podemos progresar tecnológica y científicamente, pero por encima de todo hay algo muy valioso que no vale la pena arriesgar bajo ningún motivo. ¿Saben que es eso tan valioso? La vida. Es muy triste ese futuro desalentador donde la mayor parte de animales están extintos y donde los pocos sobrevivientes son exhibidos en jaulas para venderlos como mascotas. ¿Quiénes son los verdaderos animales? Lo peor es que estos personajes no se preocupan por el bienestar de esos seres porque solo les importa mantener la apariencia de que tienen una mascota.
Asimismo, en este libro dos dispositivos presentados por Philip me dejaron mucho que pensar. El primero, denominado Órgano de Ánimos Penfield, tiene la función de alterar las emociones del usuario. De esa manera, si por ejemplo necesitamos trabajar pero no tenemos deseos de hacerlo, tan solo oprimiendo el botón correspondiente, el Penfield nos proporcionará ese empuje necesario para cumplir nuestra tarea; también, sirve para elegir lo que queremos sentir: Alegría, tristeza, depresión, etc… todo eso el Penfield lo hace posible. ¡Qué invento tan peligroso! Debido a este aparato los personajes no parecerán humanos porque han perdido toda su capacidad para relacionarse. El libro está cargado de conversaciones tan extrañas como encontrar un desconocido y decirle «Hola, me he comprado una cabra» hasta acciones sin sentido como comprarle una pintura a alguien que debemos asesinar. El uso constante del Penfield ha causado una sobreestimulación tan grande que terminó por destruir al verdadero ser humano. Lo preocupante es que en la vida real también tenemos un Penfield, pero disfrazado de noticieros amarillistas, de la cantidad de información que recibimos diariamente en internet y de una vida que no tiene pausas y que nos agota sin clemencia segundo tras segundo. Por ello, es que recomendaciones como meditar, hacer ejercicio o desconectarnos de la tecnología son mensajes valiosos que tenemos que considerar y practicar más seguido por el bien de nuestra salud mental. No recuerdo el nombre del otro dispositivo, pero lo que sí recuerdo es que agarrando las dos palancas que lo conformaban causaba que la persona entrara en un mundo virtual donde hablaba y veía a otras personas. Lo negativo es que mientras hacían esta actividad permanecían en un estado inconsciente en el mundo real e incluso podían sangrar estando conectados. Creo que los comentarios sobre este dispositivo sobran, ¿verdad?
En cuanto a lo mejor del libro, este premio se lo lleva el test Voight-Kampff, dispositivo que ayudaba a identificar quién era androide y quién no. Los exámenes, por llamarlos así, fueron muy interesantes con sus preguntas y análisis por lo que captaron todo el tiempo mi atención. De no ser por el test Voight-Kampff no habría conocido la incertidumbre en este libro. La cacería de androides también estuvo muy interesante, pudo ser mejor pero es aceptable.
Y pasando de lo negativo a lo destacable, ahora es turno de platicar sobre lo anormal. ¿Por qué este libro se llama así? Para ser franco, sigo sin entenderlo. Supongo que debe ser por estética o por algún tipo de filosofía personal, pero es un título que no corresponde con lo que encontramos en estas páginas. No entiendo como no pudo encontrar otro mejor. De hecho, Blade Runner o el cazador implacable como esta historia es conocida en sus películas, es un mejor nombre para esta historia porque describe lo que encontraremos, pero ¿Sueñan los androides con ovejas eléctricas? es una pregunta que no se resolverá después de terminar el libro por lo que no tiene sentido. Lo otro extraño fue el final que me pareció confuso, sin emociones y que para ser honesto no me gustó en lo absoluto.
En resumen, un libro que por su excelente contexto merece las cinco estrellas, pero que tiene aspectos negativos e incongruentes que naturalmente le bajan la calificación. Sin embargo, el dilema es que ahora tengo serias dudas de leer otro libro del autor, porque temo encontrar más de lo mismo en sus demás textos. Quizás en un futuro muy lejano intente leer Ubik, pero es algo incierto e improbable....more
Buen libro, afortunadamente leído después de la pandemia.
En realidad 3,5
Hace mucho tiempo no escribía una reseña por lo que confieso que me siento un Buen libro, afortunadamente leído después de la pandemia.
En realidad 3,5
Hace mucho tiempo no escribía una reseña por lo que confieso que me siento un poco nervioso en este instante. Cuando pasas bastante tiempo sin hacer algo que, previamente realizabas casi diariamente, es inevitable sentir dudas y ansiedad porque desconoces si eres realmente capaz de volver a hacerlo como antes. Sin embargo, los miedos se enfrentan, las crisis se superan, y los bloqueos se dejan atrás: no para olvidarlos, sino para recordarnos a nosotros mismos que incluso si los problemas han logrado aplastarnos con gran fuerza podemos tomar un segundo aire, volver a fortalecernos, y renacer de las cenizas como los fénix que se mencionan tanto en las historias de fantasía. Y que mejor historia para representar ese descenso a la desventura y posterior ascenso a la bienaventuranza que este libro de Albert Camus.
En La peste, libro clásico de más de setenta años de existencia, se nos narra una historia que ha ocurrido y que probablemente acontecerá a través del tiempo en cualquier periodo de la civilización humana. Ya sea la peste, el coronavirus, la tuberculosis, o cualquier otra enfermedad, lo cierto es que las pandemias son visitantes inesperados que nadie quiere recibir en su casa. Como afortunadamente no ocurren tan a menudo, creemos que con nuestra ciencia y tecnología actual jamás ocurrirá algo así nuevamente, pero lo cierto es que independientemente de los avances científicos, de una u otra manera ciertas generaciones tendrán que vivir estas desafortunadas situaciones nuevamente en el futuro. Quizás, si este libro, lo hubiera conocido antes de la pandemia que tuvimos que vivir, mi concepción sobre el tema habría sido diferente, posiblemente con indiferencia por creer que eso solo hace parte del pasado, como cuando leo sobre la segunda guerra mundial, el imperio romano, o demás. Sin embargo, leerlo después de la pandemia me ha brindado la oportunidad de tener un punto de vista diferente, y más teniendo en cuenta la cantidad de similitudes de la pandemia del Covid-19 con la que el autor describe en su historia.
Me impresionó lo relacionado a las similitudes porque sentía como si estuviera leyendo una historia basada en el Covid-19. La forma de enterrar los muertos, el aislamiento, los intentos de crear una vacuna, el sacrificio de los médicos, el miedo, la desorientación de la población, las estadísticas con la cantidad de muertos diarios, las supersticiones... tantos, pero tantos detalles son tan similares que me hicieron llegar a dos conclusiones. La primera, que a pesar de que cambian las costumbres, profesiones y creencias de las personas, la historia irremediablemente vuelve a ocurrir en un ciclo interminable que no se puede predecir. La segunda, que Albert Camus es muy buen escritor: no debe ser fácil dar tantos detalles y crear una atmósfera tan rica en contenido de algo que no se ha vivido. Realmente es impresionante lo que ha logrado construir.
Al comienzo no fue fácil la lectura porque no terminaba de acostumbrarme al estilo del autor. Posiblemente, mi inconveniente fue que intenté leer muy rápido porque pensaba que el libro sería diferente. No sé, quizás creía que la enfermedad llegaría misteriosamente, poco a poco, y que el desconcierto y el caos por el peligro se difundirían por la población; pero, no fue así. No obstante, seguí leyendo y comprendí que el objetivo del libro no era mostrar el pánico de la población por la enfermedad, sino el cambio anímico y moral que todos iban sintiendo, poco a poco, por la llegada de esta desgracia a sus vidas. Leer este libro fue como ser testigo de la extracción de energía y positivismo que un ser humano puede sufrir en su vida al vivir una pandemia. Acompañé a personajes que día tras día estaban más cansados, sin ilusiones ni esperanzas, como sintiendo que todo empeoraría, que no había una salida, que sus desgracias no tendrían fin. Fui capaz de comprender que un solo acto de cariño, como un abrazo o un beso, cuando no lo recibimos por mucho tiempo puede afectar seriamente nuestro espíritu haciéndonos sentir más desdichados. Afortunada, o desafortunadamente, somos seres demasiado sociales, por lo que cuando no podemos ser parte de una comunidad o compartir con los demás nuestra esperanza de vida decae completamente, hasta el punto de no ser capaces de encontrar un motivo para seguir viviendo. Por tanto, sentí mucha lástima por la mayoría de los personajes del libro a pesar de que no logré llegar a tomarles un verdadero cariño.
En mi opinión, la tristeza y la desdicha, serían las dos palabras claves que pueden describir perfectamente esta obra. Naturalmente hay otros temas importantes que se tratan en esta obra como lo relacionado a preguntarnos si es mejor en las dificultades pedir ayuda a Dios por medio de nuestras plegarias, o en cambio intentar solucionar nosotros mismos los problemas sin esperar ayuda divina. Asimismo, los personajes nos ofrecen grandes lecciones. Personajes que te hacen preguntarte por ejemplo: ¿Es mejor concluir algo así no sea perfecto, o intentar hacerlo perfecto pero no concluirlo?, ¿Es mejor huir a un lugar seguro, o intentar realizar un servicio comunitario en un lugar donde se necesita?, ¿Es mejor tener una carrera reconocida, o respetar nuestros valores?, ¿Puede la religión y la ciencia darse la mano y trabajar juntas?, ¿Puede la euforia hacernos olvidar de los héroes que nos cuidaron en tiempos de crisis? Me gusta responder preguntas, pero a veces también es interesante solo formularlas, y este libro, justamente, nos ofrece la oportunidad de hacer algo similar.
Si tengo que buscar algún defecto, seguramente mencionaría lo excesivamente largos que son los capítulos, la escasez de conversaciones entre los personajes, y lo confuso que puede ser a veces comprender los pensamientos de los protagonistas. Naturalmente es un libro antiguo y en aquel tiempo no era necesario explicar algo obvio para aquel entonces, pero como yo no viví en aquella época, la verdad sí se me dificultó un poco comprender el verdadero significado de las palabras y conversaciones de los personajes. Esto no es culpa del autor, tampoco mía, pero quizás sí podría ayudarnos un poco, al momento de leer, investigar un poco sobre la ideología de Albert Camus para comprenderlo mejor.
Y bien, aunque el libro me ha gustado y he finalizado satisfecho con el contenido encontrado, mi calificación oscila entre 3,5 y 4. Al final, las dificultades mencionadas en el anterior párrafo, son una razón convincente para no atreverme a puntuarlo con una calificación más alta. Además, no llegar a sentir mucho cariño por algún personaje también influye bastante al momento de tener que poner un «numerito». Eso sí, me ha parecido un texto bastante interesante con reflexiones y buenas descripciones con lo relacionado a la pandemia. No me arrepiento de leerlo. ...more
Gracias a esta lectura he aprendido que la mejor herramienta para disfrutar de una lectuNo ha estado tan mal, por lo menos me he reído.
En realidad 3,2
Gracias a esta lectura he aprendido que la mejor herramienta para disfrutar de una lectura fuera de mi zona de confort se llama «sin expectativas». Empezaré a emplearla más a menudo en otras lecturas si descubro que sus resultados son igual de provechosos que en esta ocasión.
A pesar de que Buenos presagios no es «el gran libro» en general la he pasado bien. El sentido del humor de los autores me ha divertido, las personalidades de los personajes me han agradado, y la trama principal, aunque es un cliché, fue empleado exitosamente por los autores para su propósito inicial: Provocar risas en sus lectores. No es «el gran libro» por la estructura, prosa, ni por el desenlace de la historia que fue bastante trivial, pero a pesar de ello no es tan malo como me pareció en las primeras páginas.
De los autores me llevo una imagen positiva, pero deberé leer más de sus obras para formar una mejor opinión de ellos. Eso sin duda será más adelante, al igual que el resto de reseña, que publicaré con más detalle en otro momento.
De los mejores libros que he leído en mi vida. El mejor de Saramago sin duda.
Estimado, José Saramago,
Tu obra «Ensayo sobre la ceguera» me ha conmov
De los mejores libros que he leído en mi vida. El mejor de Saramago sin duda.
Estimado, José Saramago,
Tu obra «Ensayo sobre la ceguera» me ha conmovido por completo. Gracias a tu historia he aprendido lecciones importantes, entre ellas, la más importante de todas, ser consciente del regalo que he recibido al momento de mi nacimiento. Desde hoy, y hasta el final de mi existencia, te prometo valorar cada día de mi vida porque tengo la oportunidad de disfrutar de mi sentido de la vista. A partir de ahora observaré con cariño y detenimiento los colores, los rostros de mis familiares, los animales y la naturaleza que me rodean. Cuando me sienta desorientado o desanimado recordaré tu historia, y al hacerlo traeré a mi memoria tus lecciones; lecciones que me invitan a practicar la gratitud por lo que aún no pierdo y por tener la oportunidad de volver a intentar en lo que he fracasado anteriormente. Gracias a tu relato distópico ahora podré ver el mundo de una manera diferente.
Gracias por esta historia, por tus moralejas, y por decidir convertirte en escritor. Espero que en el otro mundo exista correspondencia, para que puedas comprobar, por medio de este mensaje, que siempre existirán lectores que recordarán y agradecerán tus historias porque dejaste un legado muy bello y valioso en este mundo. Muchas gracias por todo.
Te envía un gran saludo, tu seguidor, Steven Medina.
Este libro me encanto. He tardado un mes leyendo esta novela, pero la he finalizado con gran satisfacción. Además de la histor Simplemente excelente.
Este libro me encanto. He tardado un mes leyendo esta novela, pero la he finalizado con gran satisfacción. Además de la historia, lo que más me gusto fueron los sentimientos y reflexiones que me causó el autor mientras avanzaba entre páginas. Stephen King es un genio. Es el mejor apocalipsis que he leído en mi vida.
¿Cómo saber si leer o no este libro? Es sencillo. ¿Quieren saber que sería del mundo si se muriera el 99% de la raza humana?, les gustaría averiguar ¿Cómo actuarían los sobrevivientes ante este repentino Apocalipsis? Si las respuestas son sí, entonces este libro es para ustedes. No encontraremos guerras, batallas sangrientas o zombies que persiguen y despedazan a la humanidad, como muchos textos o películas relacionadas con cataclismos; lo que si encontraremos, es un libro con acontecimientos, que nos hará meditar sobre muchos temas de la vida.
La obra está categorizada en el género de horror, pero en lo personal no me causo miedo ninguna escena o capítulo. Lo que si sentí fue tristeza por muertes de personajes, que no quería que perecieran.
Inicialmente, en la sinopsis, se nos habla de un virus letal que se propaga por el mundo y también de un inevitable enfrentamiento entre el bien y el mal; pero eso, no es más que la publicidad para que nos interesemos por el libro. Eso quiere decir, que sí nos encontraremos con esos eventos, pero ese no es el tema principal de la nóvela; el tema principal, es el éxodo que los sobrevivientes a esa enfermedad emprenden, por buscar respuestas y la vida de otros seres humanos.
El libro está dividido en tres extensas partes. En cada uno de esas partes, aparecen muchos personajes que incluso olvidaremos, y no es cuestión de tener mala memoria, es que son tan numerosos hasta desde el inicio, que es imposible recordarlos todos. La cantidad de personajes, lleva a que nunca lleguemos a saber con claridad quien es el verdadero protagonista.
Algunas personas critican que hay muchas páginas innecesarias, pero yo opino lo contrario; sin esas páginas, el libro no sería bueno. Para entender la función de esas páginas, es imprescindible leer el prólogo al inicio y así comprender porque son necesarias tantas páginas. En mi opinión son indispensables, porque lo que hace verdaderamente bueno este libro son sus personajes, y esas páginas de más, nos ayudan a conocer mucho mejor cada aspecto de sus vidas.
Es una narración contada a través de historias paralelas, que provoca que estemos constantemente interesados por leer más, eso me atrapa mucho. La narración me parece muy agradable, porque no se enfatiza en la descripción de los lugares o en el físico de sus personajes; se enfatiza, en narrar la vida de cada personaje. Conoceremos su pasado, decisiones, sentimientos, pensamientos, defectos, virtudes, formas de relacionarse con el mundo, etc. Son personajes, que poco a poco se nos hacen más familiares y por lo tanto desearemos saber más detalles sobre ellos. Tienen historias muy bien creadas y se sienten tan reales, que podrían ser la historia de cualquier persona, incluso de nosotros mismos.
La historia, produce permanentemente un estado de reflexión que va desde la sociología y la ciencia, hasta el odio y la hambruna. A pesar de que nunca nos preguntan qué haríamos nosotros mismos, al leer los problema de cada personaje provoca irremediablemente que nos preguntemos ¿Qué es lo que haría yo? ¿Iría al bando del bien o al bando del mal? Eso es un punto muy fuerte de este libro.
Lo único que no me gusto del libro, es que en la segunda parte, hubo uno o dos capítulos que me parecieron aburridos y monótonos, pero también entiendo que posiblemente era un punto de transición en la historia. Lo otro que no me gusto, fue el antagonista principal que me decepciono. Tenía alta expectativa de él, pero al final esa expectativa se rompió y me resulto pareciendo un personaje plano.
Pero en términos generales, un gran libro lleno de reflexiones, historias y mucho entretenimiento gracias a la imaginación de Stephen King. Es increíble. ...more